Balance semanal

Al fin es viernes!!!

La semana la he sentido taaaann larga que no veía la hora de que llegara el viernes y por ende el fin de semana.

Empecé la semana con velorio. Sí, un tío muy querido falleció el domingo a la madrugada. 0630 de la mañana suena el teléfono en mi casa con la noticia. Todo el plan de domingo se cambió por un día en un salón velatorio. Triste. De verdad, muy triste.

Lunes, aparte de la flojera y desgano normal propio del lunes tenía encima la tristeza y el cansancio. Y básicamente el resto de la semana ha sido parecido.

Desde el sábado anterior habíamos empezado con mi novio a formatear y reinstalar todo lo de mi portátil. Ha sido una mini-odisea. Especialmente ayer cuando me di cuenta que borré todas mis fotos de disco extraíble y que no las copié de vuelta en mi computadora. Recordando un incidente parecido de tiempo atrás, descargué un par de programas para recuperar archivos en esa situación. Así que, veremos cómo me va.

Y en medio de todo eso, el stress del trabajo tiende a incrementarse a fin de mes. Por lo tanto, el desayuno sagrado de esta semana ha sido un Ciclón sabor Berry Strong de medio litro.

He tenido un apuro increíble por cerrar negocios y me ha tocado lidiar con cada lío! "Son gajes del oficio" me consuelo.


Pero bueno, el fin de semana se constituye en la oportunidad de descansar (necesito dormir! mis ojeras al estilo Tío Lucas no dan!) y sobre todo poner orden a mi cabeza.



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